Pss pss

¿Te gustaría quedarte?
Haz click aquí para seguir este blog.

.

.
Con la tecnología de Blogger.

Búsqueda

Escribe abajo lo que quieras buscar y presiona Enter

miércoles, 29 de marzo de 2017

Vivir no es solo existir

          ¿Quieres decir algo?   

Últimamente inunda el vacío.

Y no es que no haya historias o razones (precisamente de esto hay y a raudales). Fallan las palabras. Un exceso de inefabilidad y de drama. Una falta de calma y comunicación. La vida, en su máximo esplendor.


Cuando la juventud me favorecía me falló el espacio; cuando el espacio me favorecía me falló el tiempo; y cuando tiempo y espacio me favorecieron me fallé yo.

Compártelo si te gusta:    Facebook Twitter Google+

martes, 7 de marzo de 2017

jueves, 2 de marzo de 2017

Benzodiacepinas

        



Ella siente a menudo como su cuerpo empieza a encoger, paulatina y espontáneamente, centímetro a centímetro hasta convertirse esa minúscula hormiguita que pasa desapercibida ante los ojos de los gigantes humanos.

Pequeña y agazapada, con miedo a ser pisada, asustadiza y desconfiada.

Incapaz de retomar a su tamaño original, rodeada de semejantes que ella distorsiona y sustituye por enormes seres: más grandes, mejores e inalcanzables.


¿Lógico? No

¿Estúpido? Sí

¿Inevitable? Pues también.





Compártelo si te gusta:    Facebook Twitter Google+

miércoles, 1 de marzo de 2017

Disolución

        





Ven aquí. Bésame. Tómame. Di que mis lágrimas son estériles. Que no tengo motivos para temblar. Cubre esas ideas con besos. Llámame tonta, cría, inmadura... Di que soy una dramática y una exagerada. Que todo acabará bien. Miénteme y haz que me lo crea. Vuelve a besarme hasta que duela. Rebáñame hasta el tuétano. Tápame con tu cuerpo. Perdóname.
Y vuelve a amarme.







Compártelo si te gusta:    Facebook Twitter Google+

Quiéreme

          ¿Quieres decir algo?   

Quiéreme,
manifiéstate de súbito.
Choquémonos, como por arte mágico
en este sitio, un miércoles.
Pidámonos disculpas. Sonriámonos.
Intentemos tirar el muro gélido
diciéndonos las cuatro cosas típicas.
Caigámonos simpáticos.
Preguntémonos cosas.
Invitémonos a bebidas alcohólicas.
Dejémonos llevar más lejos.
Déjame que despliegue mi táctica.
Escúchame decir cosa estúpidas
y ríete. Sonríeme. Sorpréndete
valorándome como oferta sólida.
Y a partir de ahí,
quiéreme.

Sin rúbrica, pero por pacto tácito
acepta ser mi víctima.
Déjame que te lleve hacia la atmósfera,
acompáñame a mi triste habitáculo.
Sentémonos, mirémonos,
relajémonos y pongamos música.
De pronto, abalancémonos
besémonos con hambre, acariciémonos,
Desnudémonos rápido
y volvámonos locos. Devorémonos
como bestias indómitas. Mostrémonos
solícitos en cada prolegómeno.
Derritámonos en abrazos cálidos
Vertámonos en húmedos océanos.
Ábrete a mí, abandónate y enséñame
el sabor de tus líquidos.
Mordámonos, toquémonos, gritémonos
permitámonos que todo sea válido
y sin parar, follémonos.
Follémonos hasta quedar afónicos
Follémonos hasta quedar escuálidos.
Durmámonos después, así,
abrazándonos. Y al otro día,
quiéreme.

Despidámonos rígidos, y márchate
de regreso a tus límites
satisfecha del paréntesis lúbrico
pero considerándolo algo efímero
sin segundo capítulo.
Deja pasar el tiempo, mas sorpréndete
recordándome en flashes esporádicos
y sintiendo al hacerlo un sicalíptico
látigo por tus gónadas.
Descúbrete a menudo preguntándote
qué será de este crápula.
Y un día, sin siquiera proponértelo
rescata de tus dígitos mi número
llámame por teléfono
y alégrate de oírme. Retransmíteme,
ponme al día de cómo van tus crónicas
y escucha como narro mis anécdotas.
Y al final, algo tímidos, citémonos.
En cualquier cafetín de corte clásico
volvámonos a ver, sintiendo idéntico
vértigo en el estómago.
Y en ese instante,
quiéreme.


Daniel Orviz

Compártelo si te gusta:    Facebook Twitter Google+