Pss pss

¿Te gustaría quedarte?
Haz click aquí para seguir este blog.

.

.
Con la tecnología de Blogger.

Búsqueda

Escribe abajo lo que quieras buscar y presiona Enter

martes, 14 de octubre de 2014

La misma ciudad infinita

        


Hay quien cree firmemente que las personas que mueren pueden quedar flotando a nuestro alrededor y aferrarse a la existencia mortal que un día tuvieron. Yo no lo creo, pero entiendo que para todo lo que sucede sin que comprendamos porqué pueden aventurarse distintas interpretaciones. Por mi parte, pienso que más bien somos nosotros los que nos aferramos a ellos y no les dejamos marchar, descansar en paz en nuestra memoria, y lo que hacemos no es un ejercicio de evocación, si no un intento estéril de situarlos en nuestras vidas como si nada hubiese pasado, como si siguieran entre nosotros. En el fondo poco importa, porque el resultado es el mismo, la paradoja de la presencia que nunca podemos abrazar pero que jamás nos abandona.
Porque no hay nada más inmortal que la propia muerte.

Compártelo si te gusta:    Facebook Twitter Google+